Del despacho improvisado en la cocina a las jornadas sin fin y de la flexibilidad horaria al pijama. Nos colamos en doce hogares para conocer cómo se han adaptado a una nueva realidad laboral que ha venido para quedarse.
Del despacho improvisado en la cocina a las jornadas sin fin y de la flexibilidad horaria al pijama. Nos colamos en doce hogares para conocer cómo se han adaptado a una nueva realidad laboral que ha venido para quedarse.
Para comentar debe estar registrado.